Danna Belen Villavicencio Hernández
Había una vez un señor que vendía pasteles. Un día hizo uno especial, uno para su nieto que iba a cumplir 8 años, con mucho esmero lo preparó. Al día siguiente era la fiesta de su nieto. En la noche el señor le compró las velas. El pastel tenía algo que no se había visto jamás en la vida era brillante y tenía un resplandor, efecto que lo había sacado de la harina.
El abuelo le dijo a su nieto que ese pastel era muy especial, que lo habían hecho unas hadas y que el pastel le iba a conceder un deseo. El niño no lo creyó posible, le cantaron las mañanitas y en la primera mordida se fue a un mundo diferente. En el que él se encontraba se detuvo el tiempo, apareció un hada y le dijo -Tienes un deseo ¿Cuál quieres? -Yo quiero que toda mi familia esté bien, dijo el niño. -Tu deseo es concedido -respondió el Hada. Y desde ese entonces nadie se enfermó en su familia y recordarán al niño toda la vida.
Edad: 11 años
Grupo y Grado: 6to "A"
Primaria "Miguel Hidalgo y Costilla"
Turno Matutino
Edad: 11 años
Grupo y Grado: 6to "A"
Primaria "Miguel Hidalgo y Costilla"
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